Peyuca exige una rectificación pública de los medios que dieron por buena una página de Facebook anónima
Pablo Peyuca ha mandado un comunicado de prensa exigiendo la rectificación pública de los medios que dieron por buena una página de Facebook totalmente anónima, sin saber quien está detrás de la misma:
¿Quién es “El Aquelarre de Astorga”?
Haciendo las oportunas averiguaciones, he podido comprobar que algo llamado “El Aquelarre de Astorga” no es más que una página que alguien usa para ocultar su verdadera identidad y así poder atacar a quien quiera libremente, como en esta ocasión me pasó a mí. No es ni asociación ni nada, simplemente se autodenominan así, insisto, tras el anonimato que da una página de Facebook, “un grupo de acción directa”. O lo que es lo mismo, un grupo para meterse con todo aquel que no piense como ellos.
A pesar de todo, yo sí respeto la libertad de expresión y opinión, por lo que me parece muy bien que alguien pida mi dimisión… como si quieren pedir un cohete para ir a la Luna. Lo que ya no me parece normal es que medios de supuesta información den por válida y por buena la opinión de alguien que no se sabe quién, utilizando mi nombre en todos los titulares para generar visitas y obligándome a salir al paso de unas acusaciones vertidas por no se sabe quién. A estos medios, que se presuponen serios, les pregunto: ¿Dan por buena siempre cualquier opinión, noticia, nota o escrito que les llega, se diga lo que se diga? Y ¿las tratan siempre como si fueran una noticia? Porque entonces tendrían muchísimo trabajo a la hora de publicar. ¿O acaso solo lo dan por bueno cuando se trata de atacar mi buen nombre, con el consiguiente perjuicio que conlleva hacia mi honor y mi persona?
Para colmo de males, con sus publicaciones ya no es que se me ataque gratuitamente, si no que se quiere ensuciar la reputación de una gran asociación como es la Asociación de Empresarios y Comarca, ASEMAC, a la que dedico mucho tiempo personal sin pedir nada a cambio, ya que es un trabajo sin remuneración económica, con el único fin de aportar mi granito de arena para hacer de Astorga una ciudad mejor.
Por todo lo expuesto anteriormente, exijo una rectificación pública a esos medios que han dado por buenas las acusaciones de alguien que se escuda en el anonimato, desde la cobardía más absoluta, sin tan siquiera dignarse en llamarme para contrastar si lo que se afirma es cierto o no. Así mismo, aconsejo a esos medios que pretenden ser “serios” que no publiquen cualquier opinión que vean por internet como noticia, ya que pueden perjudicar gravemente el honor de las personas o incurrir en difamaciones por no contrastar adecuadamente las informaciones que les hagan llegar.